Mesa directiva de la Federación Argentina de Colegios de Abogados.
Ciudad Autónoma de Buenos Aires, 19 de diciembre de 2017
La Federación Argentina de Colegios de Abogados (F.A.C.A.)
ha comunicado públicamente su posición institucional referida a la ley de
Reforma Previsional, recientemente aprobada en el Honorable Congreso de la Nación.
Sin perjuicio de ello, y atendiendo al marco de violencia
inusitada en la que se ha debatido dicha ley, desde la F.A.C.A. convocamos al
diálogo y al debate dentro de las instituciones de la República, pues sólo
concebimos la crítica y el disenso desde lo institucional, regidos por el
Estado de Derecho, y recordando que los Señores Diputados y Senadores de la
Nación han sido elegidos por el pueblo, el cual no gobierna ni delibera sino a
través de sus representantes.
En democracia, el debate de las ideas requiere el respeto
de las instituciones, y en especial, en un tema tan caro para la sociedad en su
conjunto, como lo es el vinculado a los derechos de quienes dedicaron su
esfuerzo de toda una vida para el desarrollo del país.
Todo ataque a las instituciones republicanas, a sus
representantes, a los bienes del patrimonio público, a los derechos de los
ciudadanos o a la convivencia, enarbolando intereses que en nada representan el
de los jubilados y pensionados de la República Argentina, debe ser inmediatamente
repudiado desde lo institucional e investigados y juzgados por el Poder
Judicial.
Asimismo, cualquier avance dirigido a quebrantar el Estado
de Derecho, traducido en el menoscabo de los derechos y garantías
constitucionales, debe ser considerado un riesgoso e inadmisible intento de
erosionar sus principales instituciones.
Los partidos políticos, como pilares del republicanismo
argentino, y toda entidad que se atribuya representación social, deberían
convocarse al diálogo y cesar en forma inmediata de cualquier “vía de hecho” en
la que pudieren haber incurrido lesionando el orden constitucional.
Sólo el debate dentro de las
instituciones de la República fortalecerá nuestra democracia.