Río Turbio - La Defensa 5

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El triste ejemplo de la tragedia de Rio Turbio

El lunes 14 de junio de 2004 a las 22.30, en el yacimiento de carbón de Río Turbio un chispazo en uno de los rodillos de la cinta transportadora que saca el mineral a la superficie inició un incendio. Luego una mezcla de gases tóxicos que se desprendieron de las paredes de la mina hizo un muro que sepultó a 14 obreros a 600 metros de profundidad.

La gestión privada de esos yacimientos, con la excusa de racionalizar la producción y reducir el personal, eliminó del plantel al empleado que se encargaba de controlar el funcionamiento correcto de la cinta trasportadora. La subsecretaria de trabajo de la provincia fue habilitando y consintiendo que se trabajara en esas condiciones. Sucedido el accidente, la directiva de la empresa inculpó a tres trabajadores por el mismo.

Cuando se cumplieron cuatro años del hecho en esa mina de Río Turbio en la provincia de Santa Cruz, la justicia decidió procesar a tres ex directivos de la empresa. Sin embargo, no avanzó en las responsabilidades políticas que sembraron el terreno para que este infortunio obrero.

La causa que investigó el accidente de trabajo en el que perdieron la vida 14 obreros en el yacimiento de carbón de Río Turbio apuntó en relación a varios de los responsables. El juez federal doctor Gerardo Caamaño, dictó el procesamiento de los ex directivos de la empresa, Fermín Lauro Garnica, Eduardo Schabner y Esteban Loncaric, por el delito de homicidio culposo y sobreseyó a los trabajadores Ramón Pazos, Gregorio Tolosa y Tomás Rodríguez, quien habían sido inculpados del “accidente”.

Sería útil que los abogados que intervinieron en los procesos penales y laborales que sucedieron a esta tragedia, nos informen sobre las secuelas y consecuencias reales que esta tragedia tuvo para las víctimas. Las páginas de esta revista pueden servir al entendimiento de la litigiosidad sin prejuicios.

Cuando habían ya transcurrido diez años de la tragedia, por Internet pudo conocerse esta nota que pone de relieve una versión muy distinta a la oficial, sobre la temida litigiosidad.

14/06/2014

Tragedia de Río Turbio: diez años después, el juicio demorado.

Fuente: www. infojus. la vaca org.

A una década del derrumbe que costó la vida de catorce mineros, la comunidad renueva su exigencia de justicia. Los tres acusados en el expediente comenzarían a ser juzgados en septiembre.

(por Adriana Meyer, nota borrada del archivo de Infojus, portal de noticias del ministerio de Justicia de la Nación y rescatada por lavaca.org) Al costado del ingreso a la mina, en Río Turbio, hay un cartel: “un buen día es un día sin accidentes”. Cada 14 de junio los pobladores de la cuenca carbonífera recuerdan ahí a los catorce trabajadores que murieron en el derrumbe. Ahora se cumplen diez años y la bronca de los familiares es mayor. La causa que investigó los hechos fue elevada en 2010 pero el juicio oral recién empezaría en septiembre. “Los compañeros necesitaban auto rescatadores que costaban 300 dólares, eso les hubiera dado media hora de sobrevida, por eso decimos que la responsabilidad es de quienes no proveyeron los elementos de seguridad necesarios”, dice Bernardino Zaffrani, abogado querellante que representa a tres de las víctimas.

Fueron los mineros del tercer turno los que quedaron atrapados a mil metros de la entrada cuando se produjo un derrumbe seguido de incendio en el centro de la mina de Yacimientos Carboníferos de Río Turbio (YCRT). Casi cincuenta lograron salir, en medio del fuego y el humo. El rescate duró varios días pero los socorristas sólo pudieron retirar los últimos cuerpos carbonizados. Durante esas horas la esperanza consistía en que algunos se hubieran refugiado mina adentro, en la intersección de túneles. Pero nadie logró sobrevivir al derrumbe de la montaña ni a los gases tóxicos que invadieron la galería principal.

El expediente pasó casi un año en la Cámara de Apelaciones de Comodoro Rivadavia hasta que finalmente fue devuelto a Río Gallegos para que se sustancie el demorado juicio oral. Hace un año los familiares de los mineros fallecidos se reunieron con los jueces del Tribunal Oral Federal Alejandro Ruggero, Jorge Chávez y Mario Reynaldi, quienes intentaron explicar las razones de tantas dilaciones. “Los imputados apelan, pero tiene que haber un corte”, dijo al salir del encuentro Mario Armella, hermano de uno de los trabajadores que perdió la vida en el socavón. “Nos vamos con la misma insatisfacción de siempre, sólo tenemos su compromiso de que van a acelerar la fijación de fecha de las audiencias”, apuntó con resignación Valeria Alvarez, hija de uno de los mineros.

La causa fue elevada con la calificación de “averiguación de accidente Mina YCRT”. A lo largo de esta década, la Justicia puso en el banquillo a cuatro directivos de la empresa. Por otra parte, sobreseyó a los trabajadores sobrevivientes que habían sido imputados. A Esteban Loncaric, ex interventor, se le imputa no haber tomado los recaudos necesarios para entrenar al personal y no haber ordenado la inmediata evacuación de los empleados. A Eduardo Schabner, ex jefe de Seguridad, demorar el ingreso de los bomberos durante dos horas. Fermín Garnica, ex jefe de turno, hubiera sido acusado de homicidio culposo por haber permitido el ingreso de personas a pie y en vehículos cuando ya se había iniciado el fuego, pero falleció. En tanto, Gregorio Tolosa, ex jefe de Electromecánica, debe responder por el origen del incendio: una cinta con bajo nivel de mantenimiento.

En 2008 cuando el juez Gerardo Caamaño dictó los primeros procesamientos, Zaffrani apeló -sin éxito- para que la causa llegara a involucrar al ministro de Planificación Julio De Vido y de Energía Daniel Cameron. Zaffrani representa a las familias de José Hernández Zambrano, Sixto Alvarado y Víctor Hernández. Ninguna aceptó lo que les ofrecieron en concepto de indemnización, porque consideraron que lo que quedaba de dividir 800 mil pesos entre catorce era una cifra insuficiente, y, además, porque les pagaban con materiales y no con dinero. Sergio Taselli – quien tuvo la concesión de Yacimiento Carbonífero Río Turbio entre 1994 y 2002- fue procesado en otra causa iniciada por el dirigente de Ate Río Turbio, Raúl Wanzo, acusado del vaciamiento de YCRT y embargado en 43 millones de pesos. La Cámara Federal sobreseyó a Cameron. Ahora el fiscal Raúl Plee apeló ante la Cámara de Casación para que el expediente continúe abierto.

Para Ingrid Hernández Flores, hija de Hernández Zambrano, “el accidente se produjo por la irresponsabilidad de las autoridades que no cuidaron la seguridad de la gente, sólo se preocupaban por la producción”. Su papá se había salvado de la explosión de 1975 y en 2004, cuando falleció en la Mina 5, le faltaban pocos meses para jubilarse. Ella en aquel momento vivía y trabajaba en Puerto Natales. La noche anterior a la tragedia había visto junto a su familia la película Subterra, sobre la rebelión de 1897 en el Chiflón del Diablo, la mina de carbón más grande del mundo ubicada en el pueblo de Lota, al norte de Chile.

“Mi papá fue la última persona que rescataron ese día. Me acuerdo que se suspendió la búsqueda porque hacía demasiado calor en la mina, nadie podía entrar. En la radio de repente dijeron que se habían encontrado dos cuerpos más, y la última persona que nombraron fue mi él”, dijo hace unos años. Sobre las causas de las muertes, Ingrid mencionó que “en el turno anterior había habido quejas por el humo y nadie les hizo caso, igual mandaron a ese tercer turno de la noche”.

En 2010 varios mineros sobrevivientes participaron de un video realizado por el portal OPI Santa Cruz. Santos Alcalá contó ante cámara: “La galería era una bola de fuego, pensé lo enfrento y me meto pero no se veía nada, unos chocaban contra otros, era un sálvese quien pueda”. Raúl Wanzo recordó: “Me dijeron sacá a todos los compañeros que puedas en lo que encuentres, y así empecé a gritarles a los que se habían salvado que subieran al camión, algunos tenían espuma en la boca, me acuerdo y me duele el corazón”.

Por estas horas hay diversas actividades en Río Turbio en memoria de Julio Álvarez, Odilón Vedia, Nicolás Arancibia, Ricardo Cabrera, Silverio Méndez, José Armella, Jorge Vallejo, José Chávez, Oscar Marchant, Sixto Alvarado, Víctor Hernández, José Hernández, Miguel Cardozo y Héctor Rebollo. Sus familias ya no quieren más aniversarios sin una condena a algunos de los responsables de la tragedia.